Wolfspeed recibe un respaldo clave en su asamblea de accionistas

Los inversores de Wolfspeed han dado un claro voto de confianza a la dirección actual durante la junta general celebrada este martes. Los resultados refuerzan el mandato del equipo directivo para continuar con el plan de reestructuración iniciado tras su salida del procedimiento concursal estadounidense (Chapter 11). No obstante, en el parqué la acción mantiene un comportamiento volátil, reflejando la cautela del mercado.

Los accionistas aprobaron de forma contundente todas las propuestas presentadas por la compañía. En la votación para renovar el consejo de administración, los siete candidatos propuestos resultaron elegidos. Un ejemplo de este amplio respaldo lo ofrece el resultado de Anthony M. Abate, quien recibió aproximadamente 17,3 millones de votos a favor, con solo unos 142.000 votos retenidos.

La consulta no vinculante sobre la política de remuneración de los ejecutivos también obtuvo un amplio apoyo:
* A favor: unos 14,9 millones de votos.
* En contra: alrededor de 2,1 millones de votos.

Adicionalmente, se ratificó la designación de PricewaterhouseCoopers LLP como auditor externo independiente para el ejercicio fiscal que concluye a finales de junio de 2026, con más de 20,4 millones de votos a favor. Estos resultados dotan a la gestión de la empresa de una legitimidad sólida para proseguir con el proceso de recuperación.

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Volatilidad persistente en Bolsa

A pesar del respaldo institucional, la cotización sigue mostrando alta sensibilidad. La acción de Wolfspeed cerró la sesión del martes en 17,15 dólares estadounidenses, por debajo de los 17,85 dólares del cierre previo.

La evolución del título desde su relanzamiento ilustra la montaña rusa de expectativas:
* 29 de septiembre de 2025: Fecha oficial de salida del proceso de Chapter 11.
* Repunte inicial: La cotización saltó desde un mínimo precrisis de 1,21 dólares hasta aproximadamente 22,00 dólares tras la reestructuración.
* Situación actual: A 17,15 dólares, el valor se sitúa cerca de un 22% por debajo de ese máximo post-reestructuración.

Esta tendencia bajista reciente se mantiene, incluso cuando los indicadores financieros clave han mostrado una mejora sustancial. Como parte del proceso culminado en septiembre, Wolfspeed redujo su deuda total en aproximadamente un 70% y recortó sus pagos anuales de intereses en efectivo en torno a un 60%.

Fortalecimiento financiero y estrategia de crecimiento

Más allá de la volatilidad diaria, la atención se centra en la solidez financiera y los planes de inversión. Un hito importante se produjo en diciembre, cuando la empresa recibió del fisco estadounidense reembolsos fiscales en efectivo por valor de 698,6 millones de dólares, amparados en la Sección 48D del Internal Revenue Code. Wolfspeed anticipa un volumen total de reembolsos cercano a los 1.000 millones de dólares, fondos que están destinados a financiar la expansión de su capacidad manufacturera en Estados Unidos.

El objetivo específico es escalar la producción de obleas de carburo de silicio de 200 mm. Si bien la desapalancamiento lograda durante la insolvencia ha simplificado notablemente la estructura de capital, la caída del 6,5% registrada por la acción la semana pasada evidencia que el mercado sigue descontando los riesgos de ejecución en un entorno competitivo cada vez más intenso.

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