Tesla Alcanza Máximos Históricos Tras un Respiro Regulatorio y un Gran Pedido Interno

El viernes 19 de diciembre de 2025, las acciones de Tesla marcaron un nuevo récord al cerrar en 495,28 dólares por título. Este hito se produjo en una jornada donde confluyeron dos noticias positivas para el fabricante de vehículos eléctricos: una prórroga concedida por las autoridades de California en un contencioso publicitario y una sustancial orden de compra interna de su camión Cybertruck por parte de SpaceX.

El conflicto con el Departamento de Vehículos Motorizados (DMV) de California había escalado hasta la amenaza de una suspensión de ventas de 30 días. La base de la disputa radicaba en los términos "Autopilot" y "Full Self-Driving", que, según un juez administrativo, podían inducir a error a los consumidores al sugerir una autonomía total, a pesar de que los sistemas requieren supervisión humana constante.

Sin embargo, la sentencia fue suspendida. En su lugar, Tesla obtuvo un periodo de gracia de 60 días para modificar su material publicitario y dejar claro que sus vehículos no son completamente autónomos. Si la empresa cumple con estos requisitos, se levantará la amenaza de prohibición. Esta decisión garantiza, de momento, la continuidad operativa sin interrupciones en la fábrica de Fremont durante el crítico último trimestre del año.

SpaceX inyecta demanda con un pedido masivo de Cybertrucks

En un movimiento estratégico dentro del ecosistema de empresas de Elon Musk, SpaceX realizó un pedido de entre 1.000 y 2.000 unidades del Cybertruck de Tesla. Estos vehículos están destinados a las instalaciones de SpaceX en Texas, representando un valor de transacción estimado entre 80 y 160 millones de dólares.

Este acuerdo adquiere especial relevancia al contextualizarlo con las cifras de producción del camión eléctrico. Según estimaciones de la industria citadas por Electrek y Cox Automotive, Tesla habría vendido aproximadamente 20.000 Cybertrucks durante 2025, una cifra muy por debajo de su capacidad anual objetivo de 250.000 unidades. El pedido de SpaceX podría, por tanto, absorber hasta un 10% de la producción anual actual, proporcionando un colchón de demanda garantizada.

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Innovación tecnológica y revisiones alcistas

El panorama tecnológico de Tesla también mostró señales de avance. Un día antes, el 18 de diciembre, la compañía presentó una patente para un vidrio especial en el techo de sus vehículos, diseñado para ser permeable a las frecuencias de los satellites. Los analistas interpretan este desarrollo como un paso preliminar para integrar directamente el servicio de internet por satélite Starlink de SpaceX en los automóviles Tesla, potencialmente transformando al Cybertruck en una central de conectividad móvil de alta velocidad.

En el frente analítico, CICC Research mejoró su recomendación para la acción a "Outperform", citando perspectivas de crecimiento renovadas ligadas a las pruebas planificadas de su futura flota de robotaxis. Otros expertos, como los de William Blair, argumentaron que la elevada valoración de la compañía se sostiene más por su posicionamiento en inteligencia artificial y robótica que por su negocio automotriz tradicional.

Una valoración bajo escrutinio entre luces y sombras

Este máximo histórico contrasta con algunos indicadores fundamentales menos optimistas. La acción cotiza con un ratio precio-beneficio superior a 312. Paralelamente, Cox Automotive proyecta para el cuarto trimestre de 2025 una caída interanual del 22% en las ventas de Tesla en Estados Unidos, atribuyéndola a mercados de adopción temprana ya saturados y a la expiración de incentivos fiscales.

El pedido de SpaceX subraya la viabilidad del Cybertruck como vehículo especializado para flotas comerciales, un éxito que no se ha replicado aún en el mercado de consumo masivo. Si bien esta transacción estabiliza los números de entregas, también puede enmascarar una demanda privada más débil de lo esperado.

El camino inmediato para Tesla está claro: tiene 60 días para satisfacer a los reguladores californianos. Un fracaso en este replanteamiento comunicativo podría reactivar la suspensión de ventas a principios de 2026. Las cifras de entregas del último trimestre, que se conocerán pronto, serán el termómetro definitivo para comprobar si se materializa la desaceleración pronosticada por terceros o si la compañía logra, una vez más, superar las expectativas.

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