Rigetti Computing: Un colchón financiero que garantiza su futuro hasta la próxima década

En el competitivo y exigente campo de la computación cuántica, la estabilidad financiera puede marcar la diferencia entre liderar la carrera o quedar rezagado. Rigetti Computing emerge en este contexto con una ventaja decisiva: sus cuentas están respaldadas por una liquidez masiva que, según los analistas, le asegura el horizonte operativo hasta el año 2030. Este sólido fundamento contrasta con un desempeño comercial reciente más débil, creando un escenario complejo para los inversores.

El dato más relevante en la actualidad para evaluar a Rigetti es su posición de caja. A 6 de noviembre de 2025, la compañía reportó disponibilidades de efectivo y equivalentes que rondan los 600 millones de dólares. Un incremento sustancial impulsado, en parte, por el ejercicio de warrants tras el cierre del tercer trimestre, una operación que inyectó aproximadamente 46,5 millones de dólares adicionales.

Expertos de la firma Mizuho Securities han señalado que este volumen de capital es suficiente para financiar las operaciones de la empresa durante los próximos cinco años, es decir, hasta 2030. En un entorno de tipos de interés elevados, esta fortaleza le otorga una clara ventaja estratégica. Mientras algunos competidores podrían verse forzados a diluir a sus accionistas mediante ampliaciones de capital urgentes, Rigetti puede concentrarse en ejecutar su hoja de ruta tecnológica, que incluye el desarrollo de un sistema de 1.000 qubits, sin la presión inmediata de buscar financiación.

Las sombras en los resultados operativos

No obstante, el panorama no es uniformemente positivo. La cotización de la acción, que recientemente se situaba en los 23,00 EUR, refleja un distanciamiento significativo respecto a su máximo anual de 48,36 EUR. Esta presión en bolsa tiene su origen en cifras trimestrales que decepcionaron al mercado.

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Un análisis detallado de los últimos resultados revela:
* Caída en los ingresos: Durante el tercer trimestre, la facturación descendió un 18%, situándose en 1,95 millones de dólares, por debajo de las estimaciones consensuadas por los analistas, que eran de 2,2 millones.
* Pérdidas operativas en aumento: El resultado operativo negativo se amplió, pasando de 17,3 millones de dólares en el mismo periodo del año anterior a 20,5 millones.
* Explicación del retroceso: La contracción de los ingresos se atribuye principalmente a un desfase temporal en la contabilización. Rigetti ya ha asegurado pedidos firmes por valor de 5,7 millones de dólares correspondientes a dos sistemas de 9 qubits –uno para una empresa tecnológica asiática y otro para una startup de inteligencia artificial con sede en California–. Dado que la entrega está programada para la primera mitad de 2026, estos ingresos aún no se reflejan en los estados financieros actuales.

El consenso analítico apunta al largo plazo

Frente a esta dualidad, la mirada de los observadores del mercado se está centrando en el potencial a largo plazo que garantiza la robustez financiera. Mizuho Securities inició recientemente la cobertura de la acción de Rigetti con una recomendación de "Compra", subrayando precisamente cómo su posición de efectivo la distingue de competidores más pequeños y con una situación de tesorería más ajustada.

El camino tecnológico anunciado por la empresa refuerza esta perspectiva. Los planes incluyen el lanzamiento de un sistema de más de 150 qubits con una precisión del 99,7% en 2026, dando el salto a una versión de 1.000 qubits en 2027.

En definitiva, Rigetti Computing navega en las aguas contradictorias de una debilidad operativa a corto plazo y una fortaleza financiera excepcional para el medio plazo. Aunque las cifras del último trimestre hayan sido flojas, los 600 millones de dólares en liquidez eliminan prácticamente cualquier riesgo de viabilidad en el horizonte cercano. Con su financiación asegurada para los próximos cinco años y entregas de hardware concretas previstas para inicios de 2026, la compañía ha ganado un tiempo invaluable para materializar sus ambiciones tecnológicas.

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