La acción de AMD se resiente por las turbulencias en Oracle

El valor de Advanced Micro Devices (AMD) atraviesa una fase de intensa presión vendedora en el mercado. El detonante no reside en sus propios resultados, que se mantienen sólidos, sino en noticias externas que están sembrando dudas sobre la continuidad del auge de la inteligencia artificial. La combinación de problemas de financiación en un cliente clave y avances tecnológicos en China hace que los inversores se pregunten si la corrección actual es excesiva o, por el contrario, un primer aviso para el sector.

La reacción en el precio ha sido contundente. La cotización cerró la sesión del miércoles en 168,70 EUR, acumulando una caída del 10,55% en la última semana. Este movimiento bajista ha tenido una consecuencia técnica significativa: la acción ha perforado a la baja su media móvil de 50 días, situada en 198,13 EUR, lo que empeora su perspectiva gráfica a corto plazo.

Este clima de pesimismo se ha visto acentuado por la actividad de los insiders. La CEO de la compañía, Lisa Su, llevó a cabo en diciembre ventas de paquetes de acciones por un valor cercano a los 27 millones de dólares. Aunque estas operaciones suelen planificarse con mucha antelación, su coincidencia temporal con el inicio del desplome bursátil ha generado inquietud entre los inversores minoristas.

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La sombra de Oracle y la competencia china

El origen inmediato de la venta masiva se encuentra en los problemas reportados por la gigante del software Oracle. Según la información disponible, un proyecto de centro de datos valorado en 10.000 millones de dólares estaría enfrentando dificultades de financiación tras la retirada de importantes patrocinadores. Esta noticia ha enviado ondas de choque a todo el sector de los semiconductores, ya que se interpreta como una posible señal de que la ola de gasto en infraestructura para IA podría empezar a moderarse, un riesgo clave para las perspectivas de crecimiento de AMD.

En paralelo, desde China llegan desarrollos que inquietan a los actores occidentales. La creación de un prototipo de máquina de litografía EUV en el país asiático supone un desafío a largo plazo para la ventaja tecnológica de empresas como AMD. La posibilidad de que China alcance una independencia más rápida de lo esperado en la fabricación de chips está pesando adicionalmente en el ánimo del mercado tecnológico estadounidense.

Los fundamentos robustos como contrapeso

Frente a este panorama de incertidumbre en el mercado, los cimientos operativos de AMD se mantienen firmes. Los datos del tercer trimestre mostraron un incremento de más del 35% en los ingresos, superando las expectativas de beneficio. Este impulso fue liderado, precisamente, por la fuerte demanda de sus procesadores para aplicaciones de inteligencia artificial.

Esta solidez fundamental lleva a varios analistas a mantener una visión positiva. Firmas como Piper Sandler reiteran su confianza en la compañía y consideran que 2025 podría ser un año de gran impulso, respaldado por el lanzamiento de nuevas generaciones de productos. La disyuntiva actual, por tanto, radica en discernir si los problemas de Oracle son un hecho aislado o el primer síntoma de una ralentización más amplia en las inversiones de IA. La evolución de este factor será crucial para el recorrido de la acción en los próximos meses.

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